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Se equipara por tanto el vicio del suelo a cualquier
otro vicio de proyecto o constructivo. Sin embargo, y
a diferencia de los cálculos estructurales de cualquier
proyecto, donde el error humano puede estar presente,
el suelo no tiene “vicios”, ya que el vicio sigue estando
en el proyectista que no ha sabido adecuar su obra a
unas características del terreno que debería conocer en
profundidad y que, lamentablemente, a veces, no conoce,
normalmente a consecuencia de un estudio geotécnico
insuficiente o defectuoso.
Asientos, hundimientos, expansividad, colapsabilidad,
carstificación, erosión, deslizamientos y fenómenos El problema que refleja el esquema anterior marca una
de subpresión por nivel freático, son algunos de los diferencia de nivel freático respecto a la base de la solera
fenómenos causantes de muchos de los siniestros del edificio que apenas alcanza los dos metros de altura, y
que acaecen y por ello la necesidad de dar al terreno la que queda compensado con el peso de una losa de
importancia real que tiene, sin olvidar naturalmente la hormigón armado de 50 cm y la estructura del edificio, al
tipología estructural, muy variable de una a otra obra, y menos con dos forjados en la zona más desfavorable.
sobre todo también las condiciones constructivas que ¿Qué pasó entonces para que se produjera un
introducen exposiciones temporales de mayor riesgo a las levantamiento diferencial de 1,50 metros, función del
del proyecto terminado. distinto peso estructural y del empuje hidrostático?
Como una imagen vale más que mil palabras, y puesto Sencillamente, la obra se realizó con una excavación
que para analizar los riesgos hay que mirar más allá de lo inicial en artesa, rebajando el nivel freático durante
evidente, nos puede servir de ejemplo el siguiente gráfico la construcción de la losa de cimentación y los
y fotografía: muros perimetrales realizados con encofrado a dos
caras, generando un recinto estanco y permitiendo
posteriormente que el nivel freático, ya sin achique,
alcanzase su cota natural. Sin embargo, y a raíz de fuertes
lluvias y del desbordamiento del colector de pluviales
que corría paralelo a la edificación, la artesa se llenó de
agua y este efecto bañera generó un empuje ascendente
(Principio de Arquímedes ) superior al peso estructural
de la zona de la edificación de solo dos sótanos, sin
alcanzar el peso de la zona con plantas en altura en
construcción, provocando el giro de la losa y finalmente
su ruina funcional. Es obvio que nadie pensaba en el
desbordamiento del colector pero: ¡¡¡Todo lo que puede
pasar, pasará!!!
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