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llegar a la meta?… me preguntaba. Pero todo desaparece dificultad y el número de obstáculos. Durante el confina-
cuando llegas al lugar del evento. Hay un ambiente especial miento seguí entrenando en casa y las ganas y metas han
que te sumerge y te lleva en volandas. No hay vuelta atrás, seguido creciendo. El próximo objetivo es el Trifeta: tres
tu familia y amigos te acompañan, los compañeros y miles carreras de tres distancias diferentes en un mismo fin de
de espartanos te animan. La adrenalina te inunda al comen- semana.
zar a correr y saltar el primer muro.
Compaginar el deporte con la vida laboral y familiar no es
La primera meta sabe a puro caviar. Un nuevo subidón, fácil, pero el equipo humano que formamos en el gabinete
lo había conseguido y… ¡quería más! Ya estaba engan- y, por supuesto, la comprensión de la familia facilita las co-
chado. Son muchas sensaciones difíciles de describir. Por sas. Debemos intentar sacar tiempo para la formación, pero
supuesto hay dolor y sufrimiento, pero la satisfacción de también el deporte ayuda mucho mentalmente. Y sin olvi-
superación es tan grande que lo compensa todo. He par- dar la presidencia de la delegación de APCAS en Baleares,
ticipado en varias carreras viajando por el país y aumen- donde nuestro objetivo es crecer en presencia y reconoci-
tando cada vez las distancias: 10km, medio maratón… la miento en nuestra autonomía.

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